Ahora que las salas de cine cambian sus butacas por camas, los ocalitos, por no ser menos, incorporan sillones para comodidad de los paseantes y facilitar que el ejercicio no sea tan fatigoso y sí mas contemplativo.
Eusebio Llorca, Cuadra Sánchez, Gonzalo Gil, Isabel Hernández, Enrique Mijares, J.M. Puente y Ángel Suárez, poniendo oídos sordos a la llamada de la molicie trabajaron en El Salín, a la vera de Villaviciosa, mientras en el río el tráfico se intensificaba con el avance del sol desfilando ante los pintores patos, cercetas, raitanes, peces varios, piragüistas y hasta un caballo. Todo esto puesto en una coctelera y agitado da para un cuadro teatral.